Querido hijo

el día que me veas anciano y ya no sea yo, ten paciencia e intenta entendeme.
cuando, al comer, me manche, cuando no pueda vestirme,ten paciencia. Recuerda las horas que pasé para enseñarte todo esto a ti.
si, cuando hablo contigo, repito las mismas cosas mil y una veces, no me interrumpas y escúchame. cuando eras pequeño, te tuve que explicar el cuento mil veces hasta que te vencía el sueño.
no me avergüences cuando no quiera ducharme, ni me riñas. recuerda cuando tenía que perseguirte y las mil excusas que intentaba para que quisieras bañarte.
cuando veas mi ignorancia en las nuevas tecnologías, te pido que me des tiempo necesario y no me hieras con tu sonrisa burlona.
te enseñé a hacer tantas cosas... comer bien, vestirte... y como afrontar la vida.
muchas cosas son producto del esfuerzo y perseverancia de nosotros dos.
Cuando, en algún momento, pierda la memoria o el hilo de nuestra conversación, dame el tiempo necesario para recordar. Y si no puedo hacerlo, no te pongas nervioso. Seguramente mi conversación no era importante y lo único que qería era estar contigo y que me escucharas.
si alguna vez no quiero comer, no me obligues. se bien cuando lo necesito y cuando no.
Cuando mis piernas cansadas no me permitan caminar... dame tu mano amiga, en la misma forma que hice yo cuando tú diste tus primeros pasos.
y si alguna vez te digo que ya no quiero vivir mas, que quiero morir, no te enfades. algún día entenderas que esto, no tiene nada que ver contigo, ni con tu amor, ni con el mio. Intenta entender que a mi edad ya no se vive sino que sobrevivimos.
Algún día descubrirás que, a pesar de mis errores, siempre quise lo mejor para ti y que intenté preparar el camino que tú debías recorrer.
Note has de sentir triste, enfadado o impotente por verme en ese estado. quédate a mi lado, intenta entenderme y ayudame como yo hice contigo cuando empezabas a vivir.
Ahora te toca a ti acompañarme en mi lento y cansado caminar. Ayudame a terminar mi camino con amor y paciencia. YO te corresponderé con una sonrisa y con el inmenso amor qe siempre te he dado.

te quiero hijo